Foto: La Jornada
El rey Felipe VI de España no estará presente en la investidura de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, que se llevará a cabo el 1 de octubre en la Ciudad de México. Esta decisión ha llevado al gobierno español, encabezado por el socialista Pedro Sánchez, a manifestar su descontento, considerando inaceptable la falta de invitación al monarca. Como resultado, España ha decidido no enviar a ningún representante a la ceremonia, según lo comunicado por la cancillería española.
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Las relaciones entre México y España han estado marcadas por la tensión en los últimos años, especialmente desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador criticó la actitud del Estado español en relación con el pasado colonial. En 2019, López Obrador exigió que el rey Felipe VI reconociera la responsabilidad histórica de España por las ofensas cometidas durante la conquista y ofreciera disculpas. La negativa del monarca a realizar este gesto provocó una ola de críticas en España y tensó aún más las relaciones bilaterales.
Relaciones Bilaterales en Tensión
En 2021, López Obrador volvió a insistir en esta demanda y acusó a empresas energéticas españolas de tratar a México como un feudo, lo que llevó al presidente mexicano a pausar las relaciones con Madrid. Sin embargo, el significado de esta pausa no ha sido del todo claro y ha suscitado diversas interpretaciones en el ámbito diplomático.
Fuentes del equipo de transición de Sheinbaum han señalado que todos los países con relaciones diplomáticas con México fueron convocados a la investidura, pero España no aparece en esa lista, lo que ha exacerbado las tensiones entre ambas naciones.
Estados Unidos Envía Delegación a la Ceremonia
Mientras tanto, Estados Unidos también se hará notar en la ceremonia, aunque su presidente, Joe Biden, no asistirá personalmente. En su lugar, designó una delegación encabezada por su esposa, Jill Biden, que incluye a destacados funcionarios que han trabajado en estrecha colaboración con el gobierno mexicano en temas migratorios. Entre ellos se encuentran Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, y Elizabeth Sherwood-Randall, asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
La ausencia del rey de España y la delegación estadounidense en este evento clave subrayan un momento crucial en la política exterior de México, mientras el país busca redefinir sus relaciones internacionales en un entorno complicado. La investidura de Sheinbaum no solo representa un cambio en la política mexicana, sino que también es un reflejo de las complejas dinámicas diplomáticas en la región.
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